El tema dado por mí en clase ya ha terminado. 15 días que han pasado volando. Y claro, ahora toca evaluar. El profesor elaboró unas fichas que servirían de evaluación. El control consistía en tres folios por las dos caras, uno para conocimiento, otro para lengua y un último para matemáticas.
Se les reparte control A y control B, para que no se copien. Sin embargo, no es más que las mismas fichas en distinto orden, y claro, tras varios controles los niños ya se han percatado de ello y muchos pecan copiando.
Unos hacen el control bien rápido, en media hora ya lo tienen listo, sin embargo otros necesitan mucho más tiempo, e incluso hay que quedarse con ellos en el recreo. Este es el caso de dos alumnos con los que me quedé, ya bien encima de ellos para que fueran haciéndolo. Me llamó la atención que uno de los dos me quería entregar los folios con la mitad de las cosas sin hacer, y cuando le pregunté que porqué no lo hacía, me dijo que no lo sabía; sin embargo, en cuanto me puse yo a preguntárselo sí que sabía. Lo único que quería era dejar de hacer, lo antes posible “esa tarea tan aburrida”.
Una vez hecho, el profesor me propuso ser yo quien los corrigiera, para que “me enfrente lo antes posible a esa tarea”. La verdad es que yo dudaba, más que por miedo, porque no sé exactamente qué método utiliza él para corregir y porque sé que va tomando anotaciones de las cosas en las que falla cada uno, para, posteriormente ir viendo si lo va superando. Sin embargo, me anima y allá que voy yo a corregir. Como buena maestra, me los llevo para casa (¡me siento una profesional y todo!). Pensé que iba a tardar mucho más, pero en un par de horitas quedó todo corregido.
Esto me ha servido para interesarme en la evaluación en el primer ciclo de primaria, puesto que a mi parecer son demasiado pequeños para estar machacándoles con suspensos o bajas notas. Buscando, buscando, he encontrado que lo más importante en la evaluación en este ciclo es la OBSERVACIÓN directa y diaria de cada alumno. Estas observaciones se recogen diariamente en fichas individualizadas de cada área.
Por lo que yo he visto con mi tutor, hace algo parecido. En lugar de recoger diariamente las observaciones en fichas, él recoge lo que le llama la atención de los controles (como he dicho antes) y ya, diariamente va viendo si lo supera.
Así que más que un método de evaluación, para calificar, veo que los controles (en estos ciclos) son para ver si el niño va progresando o no en el aula, puesto que por ello es una “evaluación continua”.
¡Un saludo!
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