Ser interino es la meta que muchos aspirantes a un puesto en la administración pública pretenden conseguir como mínimo. Es la recompensa a muchos días de sacrificio.
El opositor tiene como objetivo conseguir un puesto en la administración, pero en caso de no ser así, entrar en bolsa de empleo y poder trabajar como interino en el funcionariado es todo un logro.
Los interinos son los maestros que no han conseguido plaza, puesto que no han logrado superar todas las pruebas de las oposiciones. Es entonces cuando entran en una bolsa de trabajo y son llamados para hacer sustituciones o para ocupar puestos vacantes (bien un año entero, los que tienen mucha suerte, o periodos cortos de tiempo si están cubriendo una baja temporal). Ser interino provoca una gran inseguridad en el trabajo, puesto que nunca tienes nada asegurado. Además, estas expuesto a tener que trasladarte a donde sea aunque sea para cubrir una baja por poco tiempo, porque si no aceptas ese puesto, vuelves a bajar en la lista de interinos, así que puede que estés varios años dando vueltas de un lado para otro.
Por otro lado están los profesores que no tienen una plaza fija, pese a que han conseguido aprobar las oposiciones. Es entonces cuando están sujetos a conseguir una serie de puntos hasta obtener el lugar deseado. Esto se hace mediante el concurso de traslados.
Es por ello que estoy mencionando esto hoy, puesto que acaba de salir el concurso de traslados para funcionarios públicos docentes.
Buscando información sobre ello he encontrado este párrafo:
“El concurso de traslados para funcionarios públicos docentes es una lotería a la que juegan cientos de profesores en pos de lograr el destino definitivo. Como el hombre propone y el dios Administración dispone, son muchos los docentes que tras ganar su oposición pasan años y más años ocupando plazas en lugares que les obligan a largos, cotidianos y onerosos desplazamientos, o a estar con su familia únicamente los fines de semana y fiestas de guardar, por no citar una larga listas de efectos "colaterales". Por eso, esperan como agua de mayo los concursos de traslado. “
Realmente es lo mismo que le pasa a los profesores interinos, pero estos tienen el agravante de que SÍ consiguieron superar sus oposiciones y tiene que ser bastante frustrante.
Así que nada, para todos los que quieran opositar… solo digo que mucho ánimo y a apretar a fondo, que tenemos que ser los mejores para poder conseguir una plaza medio aceptable y una vida estable lo antes posible. ¿Quién dijo que ser maestro era fácil?
No hay comentarios:
Publicar un comentario